El Oro se ha empleado desde la antigüedad, como símbolo de poder, éxito, realeza… Es puro, valioso, resistente, inmortal. Su eterna seducción ha fascinado a todas las culturas que han poblado la tierra. Utilizado como adorno, complementos, ungüento, elixir, perfume y alimento, sus propiedades lo convierten en un verdadero tesoro.
En la Edad Moderna no se ha abandonado el uso del oro en el arte gastronómico, de hecho los mejores chef, a nivel mundial, utilizan el oro comestible para decorar los platos más exquisitos y selectos.
De todas estas deducciones podríamos decir que tenemos ante nosotros una de las mejores combinaciones posibles. Textura de Queso con Oro.
Incluye caja joyero de regalo.